
Los motores se han cargado el camión, han cerrado las puertas de carga y están a punto de irse con todo lo que posee, cuando su estómago se revuelve y por un momento fugaz se pregunta si alguna vez volverá a ver esa reliquia familiar. Solo hace falta un incidente grave para que te des cuenta de lo importante que es hacer todo lo posible para garantizar que tus pertenencias estén en las mejores manos posibles.
Entonces, ¿cómo encontrar y contratar una empresa de mudanzas confiable?
Investigación en línea
La mayoría de las compañías tienen sitios web que enumeran sus servicios, el historial de servicios, los destinos a los que se mudarán y aproximadamente cuánto costará. Este es un gran lugar para obtener información de antecedentes y comenzar a compilar una lista de compañías potenciales. Además, la mayoría de las compañías enumerarán la información de contacto, incluidas las direcciones de correo electrónico, lo que le permitirá hacer preguntas y recibir una respuesta por escrito.
Obtenga una referencia
La mayoría de las personas que conoces se han mudado una o dos veces en su vida, así que pregunta a tus amigos, familiares y colegas si pueden recomendar una empresa o si hay una empresa que no recomiendan. Ambas listas son invaluables al elegir una empresa de mudanzas.
Sepa a quién no contratar
Si no tiene a nadie a quien preguntar, el mejor lugar para comenzar su investigación es en Movingchet.com. Este es un sitio web dedicado a revelar estafas en movimiento antes de que te sucedan. Consulte sus artículos y, en particular, su tablero de mensajes donde las personas publicarán sobre los problemas y advertencias de la empresa de mudanzas. Es un gran recurso y un excelente lugar para publicar sus preguntas y encontrar respuestas.
Sepa cuáles son los signos de un mal motor
De acuerdo con la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes (FMCSA), hay indicios de que la compañía es una empresa deshonesta:
- La empresa de mudanzas no ofrece ni acepta una inspección in situ de los artículos para el hogar y, en cambio, ofrece una estimación por teléfono o Internet, sin ser visto. Estas estimaciones a menudo parecen demasiado buenas para ser ciertas, y generalmente lo son.
- La empresa de mudanzas exige efectivo o un gran depósito antes de la mudanza.
- La empresa de mudanzas no le proporciona una copia de sus derechos y responsabilidades. Cuando se mude, las reglamentaciones federales requieren que se mude un folleto para suministrar a sus clientes en las etapas de planificación de las mudanzas interestatales.
- El sitio web de la compañía no tiene una dirección local ni información sobre licencias o seguros.
- La empresa de mudanzas afirma que todos los bienes están cubiertos por su seguro.
- Cuando llama a la empresa de mudanzas, el teléfono recibe una respuesta genérica de "Empresas de mudanzas" o "Empresa de mudanzas", en lugar del nombre de la empresa.
- Las oficinas y el almacén están en mal estado o no existen.
- El día de la mudanza, llega un camión de alquiler en lugar de un camión de flota marcado y de propiedad de la compañía.
Averigüe si los motores son confiables
Póngase en contacto con el Better Business Bureau. Averigüe si alguna de las empresas de su lista ha generado algún informe. La información que puede obtener generalmente contendrá las quejas presentadas y si las quejas se resolvieron con éxito. Es raro que una empresa no tenga clientes insatisfechos; la clave es asegurarse de que si hubiera quejas, al final, el cliente estuviera satisfecho con el resultado. Lea el informe detenidamente y, si está pensando en utilizar una empresa que presentó una queja, pregúnteles específicamente sobre este caso y cómo se resolvió. Dependiendo de la gravedad de la queja, puede optar por no perseguir a esta empresa.
Vaya al sitio web de la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes del Departamento de Transporte de EE. UU. Y averigüe si su posible mudanza tiene un número del Departamento de Transporte (DOT). Este número garantiza que la empresa esté registrada en el Departamento de Transporte.
Tome nota de cualquier cosa sospechosa. Y, sobre todo, si no se siente bien, probablemente no lo sea.